¿Alguna vez te has preguntado qué es lo más extremo que se puede hacer sobre una bicicleta? En esta ocasión hablaremos acerca de una de las modalidades del MTB más riesgosas y extremas: el freeride.
El freeride es básicamente una forma de descenso en bicicleta que se caracteriza por estar fuera de los caminos y senderos tradicionales, donde la creatividad y la destreza se fusionan para superar obstáculos naturales y realizar saltos espectaculares.
Origen.
El freeride se originó en la década de 1990, cuando los ciclistas de montaña comenzaron a explorar terrenos más desafiantes y buscar nuevas formas de expresión en su deporte. Estos intrépidos ciclistas comenzaron a buscar lugares fuera de los senderos marcados, aprovechando el terreno montañoso y los obstáculos naturales para realizar saltos, trucos y maniobras audaces.
El freeride se ha caracterizado por su enfoque en la libertad creativa y la superación personal, desafiando los límites de lo que es posible sobre una bicicleta.
Diggers.
Dentro de este mundillo del freeride destaca la búsqueda por encontrar líneas de descenso cada vez más extremas y locas al mismo tiempo que se aprecian acrobacias realmente increíbles. Es por esto que, además del propio rider, en las competencias de freeride destaca la figura de los diggers, quienes, una vez que se ha elegido una montaña para descender, se encargan de trazar con picos, palas y mangueras las desafiantes lineas por las cuales transitará el rider.
Eventos populares.
El free ride MTB ha ganado una gran popularidad en todo el mundo, y se han creado competencias y eventos para mostrar las habilidades de los mejores ciclistas de esta disciplina. Uno de los eventos más destacados es el Red Bull Rampage, que se lleva a cabo en el desierto de Utah, Estados Unidos. En este evento, los ciclistas descienden por acantilados empinados, realizan saltos enormes y muestran una increíble habilidad en terrenos desafiantes.
Otro evento notable es el Freeride Fiesta de Jhony Salido. Este es uno de los eventos de freeride más grandes de México y de América Latina, donde se han visto toda clase de locuras y momentos fascinantes.
En pocas palabras, el freeride ofrece una experiencia emocionante y desafiante para los amantes de las bicicletas de montaña. A través de su breve historia, ha evolucionado hasta convertirse en una disciplina reconocida en todo el mundo, con competencias y eventos impresionantes que destacan las habilidades y la valentía de los riders.
El freeride requiere un equipo especializado para garantizar la seguridad y el rendimiento óptimo. Además de una bicicleta de montaña resistente y con suspensión adecuada, se recomienda el uso de un casco integral, goggles, guantes, rodilleras y coderas para protegerse de posibles caídas o impactos.
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